*Para el mandatario gibraltareño la sola noción de que agentes de las fuerzas del orden españolas pudiesen estar presentes en su territorio, puerto o aeropuerto, es algo inaceptable y se trata de una línea roja innegociable no sujeta a matizaciones o a negociación
El Gobierno de Gibraltar celebra la postura sumamente clara sobre el mandato de negociación de la UE esgrimida por el Ministro de Exteriores del Reino Unido, Dominic Raab, en su primera reunión con el nuevo Ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares.
El nuevo ministro de Exteriores, intentó ayer miércoles suavizar en Londres el rechazo británico al mandato negociador de la Comisión Europea sobre el futuro tratado que debe regular las relaciones entre Gibraltar y la UE. Albares salió de la reunión con Raab convencido de haber generado un clima de confianza con su homólogo de exteriores que puede facilitar las futuras negociaciones, según el ministro español.
El Gobierno de Gibraltar ha acogido con satisfacción los comentarios de José Manuel Albares en los que se compromete con el Acuerdo de Nochevieja y reconoce que el potencial Tratado entre el Reino Unido y la UE sobre Gibraltar sería bueno, no solo para el Campo de Gibraltar, sino también para Gibraltar.
Picardo ha querido subrayar que la postura de los Gobiernos del Reino Unido y de Gibraltar está plenamente unida y compenetrada y ha advertido que ni su Gobierno ni el pueblo de Gibraltar aceptarán nunca un Tratado que se parezca en modo alguno al mandato emitido por la Comisión Europea. Este acuerdo va más allá del delicado equilibrio alcanzado en el Acuerdo de Nochevieja en cuestiones muy sensibles y resulta inaceptable para el Gobierno gibraltareño como base para la negociación.
Asunto fundamental es la hipotética presencia de agentes de las fuerzas del orden españolas en el puerto y aeropuerto, algo que el pueblo de Gibraltar no aceptará, aseguró Picardo. «No se trata de una cuestión sujeta a matizaciones o a negociación: se trata de una línea roja innegociable. Cualquiera que quiera argumentar lo contrario o pensar que puede negociar al respecto lleva este proceso a un callejón sin salida».
El mandato tiene demasiadas partes problemáticas para constituir los fundamentos para la negociación exitosa de un Tratado, como las relacionadas con el asilo o la residencia, concluyó el Primer Ministro gibraltareño.
