En la campaña del pasado año en la provincia de Cádiz hubo 145 denuncias por distracciones y más del 31% estaban relacionadas con la manipulación de esos dispositivos
La distracción en la conducción es la primera causa de los accidentes de tráfico. Por ese motivo la Dirección General de Tráfico pone en marcha desde hoy hasta el domingo 20 de septiembre una nueva campaña de vigilancia y concienciación de los peligros que suponen las distracciones al volante.
En la última campaña de vigilancia de distracciones llevada a cabo por la DGT en la provincia de Cádiz, en septiembre de 2019, 143 vehículos fueron denunciados por cometer alguna distracción durante su conducción en los 577 controles realizados por los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil.
Se controlaron 5.715 vehículos de todo tipo (turismos, motos, furgonetas, camiones, autobuses…), y se formularon 145 denuncias (2,5 % del total de controlados). Las 46 distracciones como consecuencia del uso del teléfono móvil supusieron el 31,7% del total de las denuncias interpuestas.
Otras denuncias se formularon por la manipulación de navegadores (1), distracciones bajo los efectos del alcohol (38) o drogas (14), o por no hacer uso de sistemas de retención, con 17 denunciados que se ponían el cinturón de seguridad durante la conducción. Además se denunció a 5 conductores por leer mientras conducían, a otros 2 por comer, a 5 más por el uso de auriculares, a otro por distraerse con usuarios del vehículo y a uno más por buscar objetos, entre otros casos.
El subdelegado del Gobierno de España en Cádiz, José Pacheco, ha remarcado la importancia de las campañas de sensibilización, “que nadie piense que a él no le va a pasar. Si miramos al móvil no miramos a la carretera. Como docente creo en la necesidad de crear hábitos de respeto a la norma y hábitos de respeto a la vida para evitar que pongamos en riesgo nuestra vida y la de otros”.
Esta intensificación de la vigilancia realizada por Tráfico en las vías interurbanas también se realiza en el ámbito urbano, ya que se invita a las policías municipales de numerosos ayuntamientos, a llevarlas a cabo en sus respectivos ámbitos de actuación y a las que la Dirección General de Tráfico agradece su aportación a la seguridad vial.
A la vigilancia que realizan los agentes de tráfico a pie de carretera desde hace meses, la DGT utiliza medios automatizados para controlar este tipo de infracción. Actualmente dispone en las carreteras de Andalucía de 72 cámaras que están instaladas en las carreteras y en las que se puede constatar si el conductor hace uso del móvil.
UN RIESGO QUE SE CONOCE
Uno de los principales motivos que genera la distracción del conductor es la utilización del teléfono móvil durante la conducción. Su uso multiplica por cuatro el riesgo de sufrir un accidente y el riesgo es equiparable a la conducción con exceso de alcohol.
El Proyecto ESRA (Encuesta europea sobre las actitudes de seguridad de los usuarios de la carretera) realizada en 2015 destaca que la mayoría de los encuestados son conscientes de que hablar por teléfono mientras se conduce tiene efectos negativos en la conducción y que eso aumenta el riesgo de sufrir un accidente. Pese a esa alta percepción de riesgo, un gran porcentaje de conductores declara que utiliza el teléfono móvil mientras conduce, tal y como se recoge en el gráfico. Estos porcentajes son particularmente altos entre los conductores hasta los 34 años.
Un conductor que habla mientras conduce multiplica el riesgo del accidente porque:
- No guarda la distancia de seguridad suficiente con el vehículo que circula delante
- El tiempo de reacción aumenta considerablemente (entre medio a dos segundos, según los reflejos de cada conductor)
- Y, según constatan algunos estudios, la peligrosidad de hablar por el móvil mientras se conduce es equiparable a conducir habiendo ingerido bebidas alcohólicas
Los tipos de accidentes más frecuentes debidos a distracciones son la salida de la vía, el choque con el vehículo precedente o el atropello.
Ante estas circunstancias, la DGT hace un llamamiento a la responsabilidad de los ciudadanos (conductores o no) para:
- Disuadir a los conductores de llamar o coger el móvil mientras conduce.
- Antes de llamar a un móvil pensar si el destinatario va conduciendo. En caso afirmativo no llamar. Todos somos responsables.
- Comprender que como peatones, vamos también abstraídos en la conversación, y caminamos ajenos a los riesgos viales.
- Desconectar el móvil sin manos libres mientras conduce. Es lo más seguro. Nada puede ser tan urgente que compense el riesgo de sufrir un accidente.
- Los teléfonos “manos libres”, los únicos permitidos, son menos peligrosos que los otros, aunque no disminuyen todos los riesgos: distracción, señales que no se ven, mayor tiempo de reacción, maniobras sin señalizar, etc.
OTROS FACTORES QUE PROVOCAN DISTRACCIÓN
- Fumar y conducir: encender un cigarrillo se tarda una media de 4 segundos. A una velocidad de 100 km/h, en ese tiempo habremos recorrido 113 metros. Según las conclusiones de diversos estudios de investigación, fumar mientras se conduce multiplica por 1,5 el riesgo de sufrir un accidente
- El sueño y la fatiga son dos factores de riesgo muy desconocidos y a la vez muy implicados en la accidentalidad vial: alcances traseros, salidas de la vía, o ciertas invasiones del carril contrario contiguo son tipos de accidente muy frecuentes por estos factores.
¿QUÉ DICE LA LEY?
La Ley de Seguridad Vial considera infracción grave conducir utilizando manualmente dispositivos de telefonía móvil, navegadores o cualquier otro sistema de comunicación, así como, conducir utilizando cascos, auriculares u otros dispositivos que disminuyan la obligatoria atención permanente a la conducción. Estas infracciones suponen una sanción económica de 200 euros y la pérdida de 3 puntos.