La Liga y la Federación Española de Fútbol han acordado hoy la suspensión de todas las competiciones de carácter profesional, hasta que las autoridades consideren que se pueden reanudar y su vuelta no suponga ningún riesgo para la salud.
Una medida que la FEF ha hecho extensible a todas aquellas competiciones de carácter no profesional y de ámbito estatal. Es decir, que quedan suspendidas todo tipo de prácticas futbolísticas, lo que atañe también al fútbol sala y al fútbol playa, en tanto las autoridades no consideren que su reanudación no entraña ningún riesgo para la salud de los futbolistas, cuerpo técnico y empleados de los clubes, así como para los espectadores. El organismo que preside Luis Rubiales ha solicitado a las Federaciones Territoriales que adopten la misma decisión para las competiciones de ámbito autonómico.
El objetivo de La Liga y la Federación es que puedan concluirse los torneos en marcha para reducir las pérdidas económicas de los clubes y por una cuestión de justicia deportiva, aunque existe un claro problema con las fechas ya que se desconoce cuándo se superará la crisis del coronavirus y por tanto si se podrán terminar las competiciones antes del 30 de Junio, por mucho que se habiliten partidos entre semana y se comprima el calendario.