Se dispara el número de contagios y el coronavirus se mueve silencioso a sus anchas por toda España. La colaboración ciudadana deja mucho que desear y la gestión política de la crisis es nefasta. Resulta incomprensible que después de tanto sufrimiento de todos, después de tantas muertes y de la ruina económica que tenemos, todavía un buen número de españoles no lleven las mascarillas o no guarden la distancia social o no tengan las medidas higiénicas que se nos pide. Da la impresión que dos horas de fiesta importan más que la vida de las personas. O que celebrar un cumpleaños o dar besos es más importante que la propia pandemia en sí.
Estamos ya de lleno en la segunda oleada y solo los sanitarios y epidemiólogos son capaces de decirnos la verdad porque los políticos siguen jugando con las palabras y le ponen el nombre que sea con tal de no hablar de oleada, pero, desde luego, no han sido capaces, ninguno, de buscar alternativas y soluciones o ponerse de acuerdo entre ellos.
La gestión sanitaria es digna de estudio porque no se puede hacer peor. En cada Comunidad Autónoma, una política distinta, intentando cada uno demostrar que son los mejores en gestionar la pandemia.
Los hospitales no vuelven a sus actividades normales porque saben que esto van en serio, pero eso sí, los jóvenes de copa, los mayores relajados y los políticos haciendo el ridículo.
Y por si fuera poco, Boris Johnson nos hace la puñeta imponiendo una cuarentena a quienes vengan a España lo que va a hacer polvo el turismo y va a meter la ruina a la industria más importante de España . Ahora, otra vez a hacer el ridículo y a que no se nos respete fuera de nuestras fronteras. Es una tormenta perfecta porque el remate lo ha puesto esta tarde el Director del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, quien con una sonrisa de oreja a oreja (Lo he visto y escuchado en directo), HA AGRADECIDO LA CUARENTENA DEL REINO UNIDO (la misma que nos puede buscar la ruina) , PORQUE ESO DESINCENTIVA QUE VENGAN LOS BRITÁNICOS Y ES UN RIESGO QUE NOS QUITAN. Eso dice Fernando Simón mientras la Ministra Reyes Maroto busca desesperadamente un corredor seguro para que vengan a Baleares y a Canarias. Aquí cada uno va a su aire y entramos de lleno en la tormenta perfecta.
