Hace no demasiados meses un senador autonómico residente en nuestra COMARCA insistía, con un cinismo digno de alabar, en el contenido de la forzada aclaración que el Ministerio de Hacienda tuvo que emitir sobre los millones que se iban a invertir en la Algeciras – Bobadilla en 2021. Nada menos que 300, incluyendo los millones previstos para los AVEs de Almería, Córdoba y Sevilla en nuestro ferrocarril. Todo un ejercicio de funambulismo político para defender lo indefendible.
Eso sólo sería una mentira más de un político hacia la COMARCA si no fuera porque el vaso de las mentiras en esta zona ya no está medio lleno, está que rebosa y gota a gota, nuestros representantes políticos esperan instrucciones para parecer que hacen cuando en realidad lo que consiguen son buenos sillones mientras callan ante el desarrollo de otras zonas del Estado.
Podríamos enumerarlas, como los famosos 900 millones del Plan Integral del Campo de Gibraltar de 2018 que, tres años después, es un recuerdo; o el acuerdo fronterizo con Gibraltar, que ya está fuera de plazo gracias a la pasividad política de nuestro país.
Se nos acabaría el papel si las pusiéramos todas.
Es en este escenario de abandono, cuando nuestros representantes locales, en lugar de unirse haciendo frente común, se pelean entre ellos como ha ocurrido con el desencuentro entre los Alcaldes de La Línea y San Roque por la subestación y cable de REE o con la iniciativa del Alcalde de La Línea, respaldada por el pleno del Ayuntamiento, apoyando su conversión en Ciudad Autónoma autogestionada al margen del resto de la COMARCA.
Mientras, desde fuera se frotan las manos. Pocas veces sale la COMARCA en las noticias nacionales si no es por la lacra del narcotráfico pero, en esta ocasión, la ocurrencia linense ha copado titulares en todos los periódicos. ¿Por qué? Pues no porque sea noticia, sino porque es precisamente lo que quieren que hagamos: enfrentarnos entre nosotros.
Divididos valemos menos y eso lo saben todos más allá de Alcalá y lo van a aprovechar.
Aunque el cinismo y abandono de la política nacional nos tiente, no busquemos fuera los culpables. Debemos movilizarnos y manifestarnos porque no podemos permitir que nuestros ediles caigan en la falta de perspectiva.
En la COMARCA hay futuro, liderazgo, pasión y por supuesto, más licenciados que camellos, pero lo que nos hace falta son políticos que quieran unirnos, aportar soluciones a nuestra sociedad y buscar el bien común, porque es la única forma de que tengamos el futuro que nos merecemos.
No esperemos los 300 millones. No llegarán. Convirtámoslos en 300 razones para unirnos.
