La FLAVI califica la política municipal de arbolado de “contraria a los tiempos de emergencia climática que vivimos” y se suma a la Asociación Vecinal de Santiago Conchal Castillo en su denuncia en la pérdida de siete árboles adultos en Avda. Menéndez Pelayo, Calle Jardines y Avda. María Auxiliadora.
Con el Día mundial de Árbol cerca, la Federación Linense de Asociaciones Vecinales Inmaculada (FLAVI) ha querido trasladar a la ciudadanía algunos datos y reflexiones acerca de este aspecto “fundamental para nuestras ciudades, y más aún en tiempos de emergencia climática”. Se suma a la denuncia ya hecha por la Asociación Vecinal de Santiago Conchal Castillo de la última tala injustificada, de varios árboles adultos situados en Avenida Menéndez Pelayo con Calle Jardines y Avda. María Auxiliadora. «Se trataba de cinco tipuanas, un falso plátano y un paraíso, todos árboles con más de 25 años, ejemplares que según nos informan los vecinos no presentaban síntomas de enfermedad». «Tampoco está justificada la eliminación de la zona verde situada en la nueva Avenida España por un espacio insípido y sin vida» lamenta. Asegura la federación que la ciudad presenta un déficit muy importante de zonas verdes, y que se encuentra muy por debajo de lo que aconseja la Organización Mundial de la Salud. “La ciudad no ha parado de perder ejemplares adultos, como ocurrió hace no tanto con los pinos de calle Begoña y calle Escorial”.
La FLAVI expone datos del Ministerio de Transición Ecológica para asegurar que “los árboles salvan vidas”. “Un árbol adulto absorbe 150kg de CO2 al año, y es capaz de contrarrestar la contaminación de más de 100 coches, todo ello en un contexto en el que 25.000 personas mueren en España al año por contaminación del aire, y La Línea destacarse por este problema”. “Se sustituyen árboles adultos por jóvenes como si fuesen elementos intercambiables, como el que cambia una farola o un banco, como si fuesen solo elementos estéticos. Los árboles no son solo para hacer bonito, sino que son un elemento de salud pública y por eso hay que actuar con mayor seriedad”.
Por esa razón la federación y la asociación del barrio reclamarán al Ayuntamiento los informes técnicos preceptivos que hay que hacer antes de talar cualquier árbol. “Lo que tenemos claro es que esta política municipal de arbolado es contraria a los tiempos de emergencia climática que vivimos y que el Ayuntamiento no está sabiendo cuidar el arbolado urbano, tampoco ampliarlo, como demuestra su negativa a establecer objetivos concretos y evaluables en el Plan Municipal de Cambio Climático, como le pidió esta federación en sus alegaciones” finaliza.
