Un terremoto de magnitud 4.4 se registró anoche en el Golfo de Cádiz sin que se hayan notificado hasta el momento daños personales ni materiales, según informa el Servicio de Emergencias 112 Andalucía, servicio adscrito a la Consejería de Presidencia de la Junta.
El terremoto, de intensidad III, tuvo lugar a las 22.03 horas y a una profundidad de 13 kilómetros, según informó el Instituto Geográfico Nacional (IGN). El Teléfono 112 recibió un total de seis avisos de vecinos que habían notado el temblor en sus casas localizadas en municipios de la costa onubense. Concretamente, las llamadas se recibieron desde Ayamonte, Cartaya, Lepe, Isla Cristina y Huelva.
Tras hacer ronda con los operativos de emergencia, no se ha comunicado al centro coordinador constancia de daños.
Como es sabido, la amenaza de tsunami en la costa andaluza se cierne sobre el Golfo de Cádiz. Muchos científicos tienen la certeza de que, más pronto o más tarde, una ola gigante arrasará las ciudades costeras del oeste de Andalucía.
Las costas en peligro son las de Algarve, Portugal, Huelva y Cádiz. La teoría que proponen es tan simple como rotunda. María Eugenia Petit, profesora de Historia y experta en catástrofes históricas, señala que “los tsunamis se han repetido y se repetirán porque conozco la máxima geológica de que cada vez que hay un desastre, volverá a suceder. Y eso no lo podemos olvidar”.
A 400 kilómetros del Cabo de San Vicente hay varias fallas. Esas mismas causaron el terremoto que destruyó Lisboa en 1755 y que impulsó un tsunami a las costas de Huelva y Cádiz.
Baelo Claudia, la antigua ciudad romana en el municipio de Tarifa, fue arroyada por una ola gigante en el siglo II tal y como demuestran las pruebas arqueológicas.
Además, los expertos subrayan que la red de alerta de tsunamis de España sólo reacciona cuando la ola llega a tierra. Eso significa que desde que la ola toca el Cabo de San Vicente, a una velocidad de 800 km/h, deja un margen de reacción de apenas 45 minutos para Ayamonte, 60 para Huelva y 80 para Cádiz, una ciudad completamente plana y por tanto muy expuesta.
