El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, ha dado un giro a la tradicional política española de neutralidad sobre el Sahara para alinearse con la posición de Marruecos en el conflicto.
En una carta al rey Mohamed VI de Marruecos en la que, según Rabat, sostiene que el plan de autonomía para el Sáhara Occidental planteado por Marruecos en 2007 constituye la base más seria y realista para lograr una solución a este conflicto.
Poco después de conocerse la misiva, el Ejecutivo ha salido al paso y ha anunciado en un comunicado el inicio de un «nueva etapa» en la relación con Marruecos basada en el respeto mutuo y con la vista puesta en garantizar tanto la estabilidad como la integridad territorial de ambos países.
Marruecos, por su parte, ha celebrado la «postura positiva» manifestada por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tras su carta a Mohamed VI. Además, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, viajará a Marruecos antes del 2 de abril, fecha en la que comienza el Ramadán, y el presidente del Gobierno, también tiene previsto visitar el país vecino proximamente.